El pasado sábado nos escapamos hasta Fuengirola para vivir por primera vez la experiencia Marenostrum y, spoiler: nos ha flipado. El cartel del fin de semana prometía —con la magia flamenca de Vicente Amigo, el homenaje de Los Cuervos a Martínez Ares y el show de Sebastián Yatra con Ruslana como telonera—, pero lo que vivimos superó expectativas.
PRIMERA VEZ EN MARENOSTRUM: APROBADO CON NOTA
El recinto del Marenostrum Fuengirola es de esos que tienen un encanto especial. El Castillo Sohail vigilando el fondo, la puesta de sol y el mar como telón de fondo… Pocas localizaciones pueden competir con eso. Además, la organización fue impecable: explanada amplia, sin agobios, con espacio para bailar y moverse, food trucks y barras por todas partes para que nadie se quede con sed ni hambre. Todo muy bien pensado para disfrutar al máximo.
UN ESCENARIO «ANDAMIO» QUE SE CONVIRTIÓ EN ESPECTÁCULO
Al principio, el escenario nos dejó un poco descolocados: una estructura de varios pisos que parecía más un montaje a medio hacer que una apuesta escénica. Pero Sebastián Yatra se encargó de callar bocas. Cada músico estaba ubicado en una planta diferente del andamio, y el colombiano supo sacar partido al formato como si lo hubiera coreografiado él mismo.
Sabe a qué cámara mirar, cómo moverse y cuándo conectar con cada parte del público. Se pasea entre los músicos, los integra en el show, y convierte una puesta en escena aparentemente fría en una experiencia envolvente y superdinámica.
INTERACCIÓN REAL Y EMOCIONES A FLOR DE PIEL
Uno de los puntos fuertes del concierto fue, sin duda, la cercanía y conexión constante de Yatra con el público. A través de cámaras enfocando al público, las pantallas mostraban las reacciones en tiempo real: caras de felicidad, emoción y pura entrega. Y como ya es marca de la casa, Yatra invitó a los asistentes a contarle una historia de amor feliz y otra triste, para luego improvisar una canción inspirada en cada una.
Un recurso que rompe la cuarta pared y convierte al fan en parte activa del espectáculo. Emociones reales, espontaneidad y una energía que hizo que el público no pudiera estar más metido en el show.
YATRA, MODO «SUPERESTRELLA»
Lo de Yatra no es solo cantar, es dar un show completo. No para un segundo: baila, salta, se emociona, nos hace reír, nos ablanda el corazón con sus baladas y luego lo vuelve a acelerar con sus hits más pegajosos.
Interpretó varios temas de su nuevo disco Milagro, pero también nos regaló momentazos con clásicos como Traicionerao Tacones Rojos, que pusieron a todo Fuengirola a saltar y corear al unísono. Y qué decir de su complicidad con el público: cercana, natural, agradecida.
EN RESUMEN: UN CONCIERTAZO QUE REPETIRÍAMOS SIN DUDAR
Marenostrum nos ha sorprendido para bien y Sebastián Yatra ha demostrado que sabe cómo hacer de un concierto un espectáculo total. Si te gusta la música en directo, los shows que te atrapan desde el minuto uno y vivirlos en un entorno único, apunta esta experiencia en tu lista. Nosotros ya estamos pensando en la próxima.
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