Amelia Bono se sentó ayer en el plató de Y ahora Sonsoles para hablar, por fin, sobre una de las imágenes más comentadas de los últimos meses: la famosa foto en la que muchos creyeron ver un preservativo en el suelo. La empresaria e influencer afrontó el tema con calma y sentido del humor, pero también con una sinceridad que emocionó a los espectadores.
“Yo estaba allí con mi hermana por trabajo, y no le di ninguna importancia hasta que mi hijo me preguntó qué era lo que había hecho”, confesó Amelia. Ese momento, explicó, fue el que más le afectó de toda la situación. “Cuando los niños te preguntan, ya es otra cosa. Te remueve todo”, dijo, dejando claro que más allá de la anécdota, lo que le dolió fue que la polémica llegara hasta su familia.
AMELIA SE SIENTE TRANQUILA Y SEGURA
Durante la entrevista con Sonsoles Ónega, Amelia insistió en que no había nada de cierto detrás de la historia viral. “Estoy tranquila, segura y muy en paz”, aseguró, dejando claro que, aunque las redes a veces se desbordan, ella ha aprendido a no dejar que el ruido exterior le afecte.

También habló con naturalidad sobre su ruptura con Manuel Martos, con quien mantiene una relación excelente pese a haber tomado caminos distintos. “Me quedan muchos años con él, pero de otra manera”, confesó, dejando ver que el cariño y el respeto siguen siendo la base de su familia.
DE LA POLÉMICA A LA REFLEXIÓN
Más allá del titular fácil, Amelia aprovechó el espacio para reflexionar sobre la presión mediática y el poder de las redes sociales. Admitió que, aunque está acostumbrada a estar en el foco público, hay momentos en los que la exposición se vuelve demasiado personal.
Su paso por el programa fue cercano, elegante y muy humano. Y, sobre todo, sirvió para cerrar un capítulo que muchos habían convertido en un tema viral sin fundamento.


